Las investigaciones del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), en colaboración con las Universidades gallegas, han logrado catalogar por el momento dos variedades de aceituna autóctona, la Brava y la Mansa gallegas.
Estas variedades de aceituna de Galicia permiten la elaboración de aceite de oliva a partir de variedades de aceituna 100% gallegas.
Estos olivos autóctonos están adaptados singularmente al clima de Galicia y producen una aceituna con unas cualidades excepcionales en su punto óptimo de maduración.
Hasta ahora, la única manera de obtener olivos autóctonos gallegos para su plantación era a través de la multiplicación de plantones elaborados a partir de estaquillas semileñosas procedentes de los olivos existentes.
Hoy, estos olivos propios de Galicia se pueden adquirir en los dos viveros que cuentan por el momento con la licencia para producir y comercializar olivos autóctonos de las variedades Brava y Mansa gallegas, el Viveiro A Revolta, en A Coruña, y el Viveiro Costa de Lóngaras, en Lugo.
Estos dos viveros gallegos cuentan con una concesión por tres años que se irá renovando para que puedan explotar comercialmente la producción de olivo autóctono de Galicia. De este modo los olivareros gallegos podrán ampliar sus plantaciones de olivo propio del país catalogado por el CSIC.
Viveiro A Revolta
Dirección | Lugar A Mosca, 7A, Sta Mª de Vigo, Cambre (A Coruña) |
Teléfono | 619 087 864 |
arevoltaviveiro@gmail.com |
Viveiro Costa de Lóngaras
Dirección | LU-113, Km. 2, 27730 Abadín (Lugo) |
Teléfono | 610 739 455 |
vivercosta@gmail.com |
Desde los productores se destaca que estas variedades de olivo, comienzan a producir un rendimiento significativo a partir del quinto año tras la plantación y que a los diez años se encuentran a pleno rendimiento.
Pese a que por el momento sólo están disponibles estas dos variedades de olivo, el CSIC destaca que en Galicia hay hasta 19 variedades de olivo autóctono y que en los próximos años se irá procediendo a su catalogación.
Con esta iniciativa se espera la recuperación de los olivos originarios de Galicia de las variedades Brava y Mansa gallegas, para convertir la producción de aceite de oliva 100% gallego en un alternativa económicamente rentable para nuestro medio rural.