El olivo llegó a Galicia durante la romanización de la Península Ibérica en el siglo I. En lo que los romanos llamaron Gallaecia encontraron un clima idóneo para el cultivo de la aceituna, un producto vital para ellos, pues no sólo lo usaban en la cocina, sino también como combustible y como base para elaborar ungüentos.
La extracción del aceite de oliva ya la practicaban los griegos y los fenicios, pero es en Roma en donde su producción se expande enormemente, popularizando su consumo entre todas las clases sociales. Esta incipiente industria olivarera encuentra en Galicia un terreno idóneo para la producción de aceites de gran calidad con los que abastecer a la Hispania romana.
Cuando se habla de aceite de oliva Premium se hace referencia a aquellos aceites de oliva virgen extra da máxima calidad, con unas características fuera de lo común.
Leer másSi te deshaces del aceite usado tirándolo por el fregadero o desagüe debes saber que no es una buena idea, por varios motivos.
Leer másHay muchos modelos diferentes de envase en los que vas a encontrar el aceite de oliva, cada uno con unas características que conviene que conozcas.
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